Wonder Child - Ruud Schoemaker (1959)
Ruud Schoemaker (Vlaardingen, 1959) se formó en la Academia Minerva, en escultura y pintura. Si miras un cuadro de Ruud Schoemaker, te imaginarás en un mundo de sueños lleno de símbolos, mitos y referencias religiosas. Cada pintura cuenta una historia, dejando mucho espacio para la interpretación personal del espectador. Mirando más largo descubres, más o menos por casualidad, numerosos elementos figurativos, que en un principio parecen haberse retirado de tu mirada. Tanto el plano de la imagen como la historia constan de varias capas y tienen un doble significado. El uso del color es colorido, sin ser estridente. No hay paleta de tonos; Ruud trabaja con contrastes de colores claros y no parece tener una preferencia especial por una gama de colores en particular.
Al igual que la representación y el uso del color, la forma de pintar también es compleja. La pintura y las herramientas se manipulan de diversas formas, a veces transparentes y fluidas, a veces opacas y pastosas. A las superficies y manchas se les da forma y significado a través de la línea.
Los marcos son una parte muy especial de las pinturas de Ruud Schoemaker. Son una extensión de la pintura y forman, por así decirlo, una zona de transición entre el lienzo relleno hasta el borde y la pared vacía, realizada por ellos mismos y dotada de decoración y color.
La obra de Ruud Schoemaker cautiva con su propia forma de imaginar el mundo y tiene un enorme poder expresivo. Ruud Schoemaker se ha hecho un nombre principalmente en los Países Bajos y Alemania y en el pasado ha expuesto en la Galerie Van den Broek y en varias exposiciones de arte moderno con obras de artistas como Anton Heyboer, Jan Cremer, Clemens Briels.
Título
Niño Maravilla
Materiaal
Óleo sobre lienzo
Afmetingen
98x118 cm